Ícaro
Agita brazos y piernas mientras cae. Se impacta contra el mar. La velocidad que ganó en la caída libre lo sumerge. Antes de perder el conocimiento, logra entrever un pez de color rosado con franjas anaranjadas.
Agita brazos y piernas mientras cae. Se impacta contra el mar. La velocidad que ganó en la caída libre lo sumerge. Antes de perder el conocimiento, logra entrever un pez de color rosado con franjas anaranjadas.
Estamos arrumbados en la parte menos calurosa de la Casa Grande, porque es el único sitio donde cabemos todos y el ventilador funciona. Tío Tomás repite, por quincuagésima primera ocasión, Lydia de Highly Suspect. —¿Por qué las buenas canciones duran cuatro minutos? —se lamenta, mientras yo me pregunto cuánto más nos va a durar… Leer más »