Lavo mis cabellos

para blanquearlos con los pasos

del frío infinito

simulando un cardumen de gardenias

que cuelgue hasta mis pechos.

 

Insisto en resecar mi frente

para que nazca un surco

donde sembrar generosos árboles

que extiendan su territorio

hasta cubrir mi vientre de musgo fresco.

 

Encorvo mi espalda para iniciar la danza,

uso sombrero con listones de fuego

morado, verde, rosa.

 

Jorobo los dedos de mis pies,

a los que les crecen montañas,

y se les forman valles,

para que los recuerdos sean niños extraviados

que juegan con piedrecillas a la orilla de un lago.

Niños enredadera que cosquillean mi empeine.

 

Quiero envejecer,

pero mis brazos se llenan de nidos,

las aves cantan la tersura de mis ojos

y una cascada cae desde mi sonrisa

hasta el grito.

 

He fracasado,

soy biósfera en una isla que nadie ha descubierto,

desembocadura delta de campos enfurecidos.

 

Lloro,

destruyo las palmeras,

arranco los listones del sombrero,

sacudo mis piernas para hacer caer a los críos.

 

Quiero ser tu misma imagen,

el reflejo de una vida que se oscurece,

el puerto donde se despiden las familias

 

y no un maldito jardín ambulante.

 

Deseo tu sonrisa,

inmóvil.

La seguridad que sientes

al encontrar en tu bolsillo

un cocktail de medicinas.

 

Deseo la reminiscencia de la tierra que te vio nacer,

la imagen de tu calle,

la algarabía de los negros cantando en el parque,

el mar que te hacía suspirar,

las peleas en la esquina caliente

y la felicidad tuya

cuando la muchacha más hermosa

caminó a tu lado.

 

Deseo ser tu hija,

la mujer que amaste

cuando iniciabas la universidad,

la rubia a la que hiciste esposa,

la mulata que dejaste loca

y deambula mientras grita

aún puedo hacerte feliz,

 

deseo ser la enfermera de tus últimas horas.

 

Deseo tu deseo,

los pequeños besos

con los que alivies mis manos

mientras me tranquilizas

asegurando que todo estará bien.

 

Pero soy tierra nueva,

isla perdida,

pastizal húmedo,

la simple caída de una cascada

que es llanto

con olor a gardenias.

Barreto, El gato shúrik, Linóleo, 2013.

Barreto, El gato shúrik, Linóleo, 2013.