Brevísima investigación sobre el arte de traducir
Al menos eso es lo que nosotros interpretamos. Y eso es traducir: interpretar sus gestos y convertirlos en palabras. Pero otra cosa es obligarlo a utilizar el habla humana para comunicar lo que él ya es capaz de expresar en “lenguaje perruno”. Por lo tanto, resulta superfluo enseñarle a un perro a hablar si lo que se desea es entenderlo.